Hoy jueves ha iniciado la etapa de reflexión en México, ningún anuncio electoral más en la televisión, radio o prensa, ni una sola aparición pública de los candidatos hasta después de las 18:00 horas del domingo 5 de julio, nada más, que nuestra conciencia y razón para decidir el futuro de nuestro país.

A partir de hoy, los mexicanos debemos hacer un último esfuerzo, olvidar todo el circo mediático que generaron los partidos políticos, debemos pasar de las “Marianitas” del PRD, de los “luchadores y taekwondoínes” del PAN, de los “mimos y futbolistas” del PRI, debemos pasar de aquellos personajes y de aquellas historias que han inundado nuestros sentidos, de toda esa palabrería vacía, que día con día nos bombardeo como en una guerra.

El 5 de julio no votemos por el que haya hecho el spot más divertido, ni tampoco por el que haya criticado más a su adversario o por el que haya preferido quedarse callado.

El próximo domingo, votemos por aquel que realmente creemos dio propuestas, sea el partido o candidato que sea, que nuestro voto sea razonado.

Que no sea un voto a la ligera, porque el valor que le damos a nuestro voto es el valor que le damos a nuestro futuro.