Ayer Obama animó a su legión de pequeños donantes, más de un millón y medio, a colaborar en el pago de la factura electoral de Hillary Clinton, 22 millones de dolares que en su mayoría ha salido de la fortuna personal del matrimonio Clinton.

Las facturas pendientes son de empresas como la de Mark Penn, que tuvo que dimitir a mitad de campaña por hacer lobby para el gobierno Colombiano, la empresa Media Strategies&Research encargada de la compra de espacios publicitrios, la empresa especializada en bases de datos Catalist o Grunwald Communicatios una consultoría de comunicación.

A cambio Hillary ha puesto a disposición de Obama a sus donantes más generosos y pudientes, las estrellas de Hollywood que ya se han comprometido a apoyar al Candidato demócrata y una serie de empresarios que se reunirán con el Senador de Illinois el próximo jueves en el Hotel Mayflower.