Parece que la subcomisión que está estudiando posibles reformas de la ley electoral, apoyandose en los informes del Consejo de Estado y, aunque es la primera noticia que tengo, en un informe de la Junta Electoral Central, está llegando a sus primeras conclusiones. La primera es atar más corto a los gobiernos  prohibiendo las inauguraciones en los 15 días de campaña electoral y limitando la publicidad institucional (las famosas «campañas de logros») durante los 54 dias del periodo electoral.

   Quizás lo más novedoso es la visión «global» de vivir en un mundo interconectado que lleva a la subcomisión a proponer que estas medidas se  apliquen a todos los procesos electorales y a todas las administraciones, independientemente de que se encuentren en un proceso electoral que les afecta directamente, por lo que un ayuntamiento no podría inagurar o publicitarse en periodo de elecciones generales o, como pasó recientemente en Valencia, una comunidad autónoma, no podrán hacerlo durante el proceso de las elecciones europeas.

Lo sorprendente es que está visión «global» no les lleve a levantar la prohibición de difundir encuestas en la última semana de campaña, algo que se está planteando reiteradamente. Aducen del riesgo de que todas las encuestas se concentren el último día de campaña, lo que dejaría a los partidos sin capacidad de reacción pero la realidad es que el problema va mucho más allá, y como se viene señalando con  Internet, dificilmente se podrá evitar.