Una vez más Mccain ha logrado sorprender a propios y extraños, tras suspender la campaña y solicitar la cancelación del debate, apuntaba su plan: una reunión bipartidista en la Casa Blanca a la que deberían asistir los dos candidatos, junto a los speakers de las Cámaras.

Desde la Casa blanca primeron felicitaron a Mccain por la decisión, después invitaron a ambos a la reunión.

Obama, una vez más, ha respondido de manera confusa. Primero poniendo el debate por encima de todas las cosas, luego señalando que es capaz de hacer más de una cosa a la vez, haciendo campaña y solucionando la economía, pero finalmente no ha tenido más remedio que emitir un comunicado conjunto con Mccain y aceptar la invitación a la Casa Blanca.

Iniciativa y liderazgo, Punto para Mccain