Juan Pedro Quiñonero en el ABC nos resume la guerra planteada en internet en torno a las candidaturas de Segolene Royal y Sarkozy. Según el artículo internet se ha convertido en el canal para meter en la agenda informativa información negativa sobre el adversario, sea o no cierta, y para difundirla de manera masiva. Creo que de momento hay más de lo primero que de lo segundo, pero de lo que no hay duda es de que internet ha dejado de ser el pariente pobre de las contiendas electorales. Noticias como esta o la participación de algunos candidatos en Leweb3, el encuentro de blogeros más importante de Europa, a pesar de haber sido invitados sólo un día antes, son buena muestra de ello.