Desde el sábado pasado en las filas socialistas no dejan de oirse referencias a la lección de ciudadanía que supuso la manifestación de Madrid.
Alguién me puede explicar ¿cual es la diferencia entre ésta y las celebradas hasta ahora? ¿dónde está el secreto para que el gobierno que ha ignorado hasta cinco veces la voz de la calle decida ahora escucharla con devoción? El número, las rosas blancas, los artistas…. o simplemente la intención.
Cada día es más peligroso acudir al pueblo si se pretende jugar con él. No me extrañaría que un día «el pueblo» se acabe hartando de ser tan traido y llevado, como corderitos, y entonces los resultados si que pueden resultar irreparables para la democracia.