No se si es algo cíclico, o como se dice ahora es algo tendencial pero la relación de los españoles con la política y sobre todo con los políticos deja mucho que desear. A juzgar por la última encuesta del CIS de la que hoy hablan los medios de comunicación, el 50% de los españoles pasan de la política, el 52% que bastantes o casi todos los políticos están envueltos en casos de corrupción y el 60 que una vez elegidos, diputados y senadores, se olvidan sistemáticamente de sus promesas electorales.
Teniendo en cuenta que hay un 40% de gente muy interesada en la política y que la participación electoral fluctua entre el 60 y el 75% uno se pregunta hasta que punto la politización de la vida política actual es una buena estrategia electoral. Independientemente de los resultados el principal daño colateral es que el 60% de los españoles se sienten absolutamente irrelevantes para la vida política.En esta pregunta habría que profundizar ahora que se habla tanto de democracia participativa.
Más llamativo aun es el apartado dedicado a los funcionarios, aunque sólo un 34% considera a la mayoría de ellos como seres corruptos, el número es tremendamente alto comparado con el 90% que nunca ha tenido una experiencia de este tipo. El numero de desconfiados aumenta al hablar del trato que estos dispensan, más del 80% opinan que es cuestión de contactos aunque el 42 % opine que el trato recibido es correcto, imparcial…