Biden no se entera de su campaña

Joe Biden tiene cierta gracia, no se le puede negar que no se corta y dice lo que piensa, por eso se llevaba tan bien con Mccain hasta que fue elegido candidato a la vicepresidencia.

Tras asegurar que Hillary era mejor candidata ahora ataca uno de los anuncios de su campaña, el que se metía con la incapacidad de Mccain para usar un ordenador:

Obama concentra sus fuerzas o sigue la retirada,

Si esto fuera un juego de mesa podríamos decir que Obama entrega Dakota del Norte, donde tenía abiertas 11 oficinas. Las 50 personas que trabajaban allí han sido recolocadas en oficinas Minnesota y Wisconsin. La estrategia 50/50, cada vez es más 30/50 y en las próximas semanas terminará siendo 10/50, como la de Mccain, la pregunta es si ha sido esfuerzo perdido, o si ha ayudado a mantener la imagen de Obama a nivel nacional, algo cada día más importante, y si ha servido de apoyo a otros candidatos demócratas.

Ataque, ataque y ataque

Decía hace poco Mark Penn en Politico que los ataques negativos no le gustan a nadie en las encuestas pero son tremendamente efectivos, habrá que buscarle un nombre de efecto, qué tal si lo llamamos «Rove»? Nuevo anuncio negativo de la campaña de Mccain, que las últimas semanas era más atacado que atacante, ¿será por las encuestas?. La cosa se calienta aún más. Si a falta de 45 días estamos así, no sé cómo va a terminar esto. Un ataque directo a Obama y sus amigos. Una crítica a la manera de hacer política en Chicago, donde los estilos de la mafia no se han olvidado del todo:

¿Dónde está Bradley?

Durante el último mes de campaña algunos renombrados expertos electorales se preguntaban dónde estaba Bradley. Nadie lo había visto aún, pero todo el mundo suponía que debía estar por aquí, y muchos se maliciaban que las propias encuestadores lo estaban usando en sus cocinas sin avisar, para no sembrar el pánico.

El tal Bradley, es el nombre de un fenómeno electoral, el «efecto Bradley», también llamado Wilder, que señala una diferencia entre los sondeos y los resultados finales cuando en Estados Unidos compiten un candidato blanco y otro que no lo és. El tal Bradley se presenta incluso en los sondeos a pie de urna.

El nombre viene de Tom Bradley, candidato afroamericano a gobernar California en 1982 que lideraba todas las encuestas y perdió sorprendentemente. Muchos blancos habían dicho que estaban indecisos o que votarían a Bradley para no parecer racistas, pero a la hora de la verdad, en la intimidad con su voto secreto se habían decantado por el otro candidato, el Republicano George Deukmejian.

Ayer una encuesta de AP-Yahoo News, en colaboración con la Universidad de Standford, señalaba que la animosidad racial podría costarle a Barack Obama la Casa Blanca, pues un tercio de los demócratas anglosajones tienen opiniones negativas sobre los afroestadounidense, a los que consideran “perezosos”, “violentos” y responsables de sus propios problemas. Esto podría provocar una perdida de votos de entre 1 y 2.5 puntos, que puede resultar determinante en muchos estados.