El 4 de octubre se lanzaba a la red una nueva iniciativa de participación ciudadana, yopolitico, pronto empezó el ruido en la red. La principal acusación era sobre su orientación política, y su posicionamiento como organización abierta, no partidista.

Me pareció oportuno seguir la iniciativa durante una semana, que son como 100 dias en internet, y valorarla a posteriori desde mi experiencia en iniciativas ciudadanas parecidas. Hace años, en 2002, participé en los primeros pasos de Hazteoir, una iniciativa ciudadana que no deja de coger fuerza en los últimos tiempos. No duré mucho, mi última campaña fue contra la guerra de Irak, pero en el camino aprendí mucho sobre participación ciudadana. Muchas de estas lecciones quizás sirvan a la gente de yopolítico.

1. Me parece muy difícil que, al menos en España, puedan funcionar plataformas totalmente abiertas de participación ciudadana. En mi opinión es necesario una orientación inicial, una identidad que ejerza de llamada y aglutinador, y unas personas motivadas que ejerzan una función de impulso inicial y coordinación posterior.

2. La transparencia siempre gana. No sirve de nada esconderse, o presentarse como lo que uno no es, las cosas cantan y más tarde o más temprano «todo lo oculto será descubierto». De ahí que no vea muy acertado presentarse como una herramienta neutra de participación ciudadana, si en el ánimo de los promotores, quizás me equivoco, está ser una herramienta de movilización progresista. Creo que frases como

«Estamos decididos a avanzar hacia la justicia, la igualdad y la libertad, a defender tus derechos, a promover la paz, proteger el planeta y profundizar en la democracia. Algunos dicen que éstas son ideas “de izquierdas”, “socialistas” o “progresistas”. Nosotros creemos que son ideas de sentido común que ayudan a construir un mundo mejor.»

no aclaran la situación sino que la confunden un poco más. No creo que sea muy útil contestar a 5 preguntas con el mismo argumento, sería más sencillo, sin juzgar a favor ni en contra, sólo por conocer la orientación responder a una pregunta tan sencilla como si estarían dispuestos los promotores a lanzar una campaña contra o a favor del aborto.

Otra cosa en esta línea sería compartir un dato tan sencillo como el del número de personas que se han apuntado a la iniciativa, también puede servir en la política de transparencia.

3. No hay que tener razones sino tiempo y ganas de trabajar. Mi sensación es que en este tipo de plataformas gana el que más trabaja, da igual quien tenga mejor estrategia o más razón, suele ser cuestión de horas de teclado…

4. Contra algo siempre se vive mejor. Para que la participación sea efectiva, debe ser capaz de ofrecer resultados, por pequeños que estos sean, y, si es posible, ofrecer un enemigo con el que merezca la pena luchar. De momento se empieza «disparando» a Naciones Unidad, no sé si genera suficiente appeal.

Hasta aquí las valoraciones/consejos. De momento da la sensación que la iniciativa anda un poco parada, quizás le falta tiempo, o alcanzar una cierta masa crítica… seguiremos observando.