El uso indiscriminado de información personalizada con fines electorales saltó a la palestra por el escándalo de Cambridge Analytica, la empresa que ayudó a Donald Trump a ganar las elecciones en EEUU
Una comisión parlamentaria de diputados y senadores avaló el pasado jueves la aplicación directa en España de un reglamento europeo para restringir la publicidad política segmentada, es decir, el uso de datos personales o grupales con el fin de predisponer al elector a que apueste por un determinado partido.
Publicado en epe.es