Mucho hemos hablado, también en este blog, de las posibilidades de la maquinaria política construida por la campaña del nuevo Presidente de Estados Unidos. Una vez en la casa Blanca, rebautizada como la Casa del Pueblo, se va concretando la nueva estructura.

Parece ser que tendrá dos ramas una de acción política y una de acción social. La primera dependerá directamente del Partido, al mando del Tim Kaine, y procurará mantener la actividad política de todos aquellos que de diversas maneras se involucraron en la campaña. Para ello cuentan con una amplia y completa base de datos y van a establecer estructuras locales en forma de un coordinador, en los Estados no controvertidos, y varios en los más disputados. Su objetivo será impulsar la agenda del Presidente, algo que puede entrar en conflicto con los propios miembros del Partido, Congresistas y Senadores, reforzando una estructura nacional ajena al federalismo tradicional de los partidos americanos, en los últimos años especialmente del Partido Demócrata. El presupuesto 75 millones de dolares que se recaudarán de donantes privados.

Lo más novedoso, en mi opinión, es la otra rama, la social, una organización que nace de la misma semilla pero no estará vinculada con el Partido. Me parece una idea genial para mantener a la gente en contacto, vinculada, ilusionada, en marcha con algo más que la actualidad política, que mucho me temo que les terminará aburriendo, por muy Obama que sea Obama, y muy activos que sean los coordinadores.